Ubud ha sido el lugar escogido para abrir las puertas de Mandapa: el nuevo Resort de Ritz-Carlton en Bali, que apuesta por acercarse a la vida de los lugareños, pero sin tener que renunciar a las comodidades y el lujo que ofrece un establecimiento de este tipo.
Y es que en la isla más popular de Indonesia, no solo existe el típico turismo de sol y playa que atrae cada año millones de viajeros. Si nos adentramos en el interior de Bali, nos vamos a encontrar con un paisaje totalmente diferente: selvas, campos de arroz, ríos y volcanes, que se entremezclan con los mitos y leyendas que impregnan cada rincón de este paradisíaco lugar.
El tercer Resort de la compañía norteamericana que lleva el exclusivo sello Reserve, se encuentra a pocos minutos de Templos Sagrados como el de Goa Gajah o el de Tirta Empul. También se hallan en los alrededores inmensos bosques, poblados por miles de monos.
Como afirman los responsables del complejo, Mandapa “más que un Resort, es una aldea”, que permite a sus huéspedes sumergirse en la cultura y la forma de vivir de la isla. Lo primero que nos sorprende al llegar es su imponente entrada, muy parecida a las que podemos hallar al entrar en un Templo.
Pero esto es apenas el comienzo de lo que nos espera, porque al asomarnos a la baranda que se encuentra en la parte opuesta, nos vamos a quedar sin aliento al contemplar el extraño paisaje que se despliega ante nosotros, con numerosos arrozales, diversas edificaciones locales e incluso un antiquísimo santuario, en medio de un exuberante valle.
La disposición del Resort que ocupa diez hectáreas de terreno, es lo más parecido que nos podamos imaginar a una típica aldea balinesa. Son 35 suites y 25 villas con piscina particular, repartidas entre la ladera y el río Aung. Sin duda un alojamiento ideal, tanto para personas que buscan el lugar perfecto para descansar, como para grupos familiares que les gusta realizar todo tipo de actividades.
Los huéspedes de Mandapa podrán vivir una experiencia única y colaborar en la cosecha de arroz de la forma tradicional. Tiempo después, los encargados del establecimiento le harán llegar a casa, los primeros granos de arroz que sembraron en estas fértiles tierras.
El diseño del complejo fue encargado al prestigioso estudio Designwilkes, uno de los más importantes en el continente asiático. Otro de los aspectos más llamativos de las habitaciones, es la decoración con murales multicolores creados por artistas de la isla, que le proporcionan un toque muy moderno, en contraste con las maderas en tono oscuro del mobiliario.
Debido a la inclinación del terreno, siempre hay a disposición de los huéspedes un mayordomo, para trasladarlos en buggy de un lugar a otro de la villa. Mandapa cuenta también con varios restaurantes cerca del río, que te permitirán saborear los deliciosos platos de la región, mientras admiras los campos de arroz.