El Ferrari más feo del mundo

Tener un Ferrari es sinónimo de riqueza y distinción pero no tiene por qué serlo de buen gusto y es que incluso una belleza como la del un Ferrari F430 Scuderia es posible estropearla con una capa de pintura mal puesta. Aunque sea, supuestamente, arte.

Se trata de la obra de Laurence Gartel  conocido por crear piezas personalizadas para personajes como Justin Timberlake y Britney Spears.

«A un Ferrari hay que dejarlo en paz». Eso puede ser cierto, pero cuando un coleccionista tiene más de 10 de ellos, puedes empezar a ver las opciones», afirma Gartel. «Las mentes artísticas y culturales cambian nuestro proceso de pensamiento. Así que me quito el sombrero ante Enzo Ferrari por tener una verdadera visión en el mundo del automóvil. Está a punto de convertirse en un significado profético».

En algo tiene razón, a un Ferrari hay que dejarlo en paz.

 

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