Harry Winston presentó en la pasada edición de Baselworld 2016, la séptima edición de su famoso Tourbillon, una pieza realmente creativa y compleja, que encierra toda la experiencia e innovación que la firma norteamericana ha acumulado en todos sus años de existencia.
La gran particularidad de este extraordinario reloj, es que en su interior luce dos impresionantes tourbillones biaxiales que parecen bailar con el tiempo. Y es que Harry Winston se ha vuelto a superar una vez más, con esta nueva versión de su complicación más emblemática.
Harry Winston Histoire de Tourbillon 7 forma parte de una exclusiva edición limitada de tan solo 20 unidades. Estéticamente destaca una estructura de aluminio rojo o antracita que rodea los tourbillones biaxiales, en la parte izquierda de la esfera.
El movimiento de los dos tourbillones es bastante complejo. Y es que la jaula del primer tourbillon se mueve dentro de una segunda jaula y ambas giran en distintos ejes. La primera jaula del tourbillon acaba su rotación en 45 segundos y encierra una rueda de balance que inclina 30 grados, mientras que el segundo tourbillon y el escape realizan una trayectoria que se completa en 75 segundos. Como se puede apreciar, las dos jaulas asumen infinidad de posiciones, fruto de una técnica impecable.
Para poder coordinar el comportamiento de estos dos cuerpos, el Histoire de Tourbillon 7 usa un diferencial esférico que maximiza el rendimiento, conectando ambos tourbillones. También hay que decir, que tanto los puentes como la platina inferior están fabricados en titanio, que pese a ser un material muy ligero, le proporciona una gran robustez.
En cuanto a la caja de 50 mm fue contruída utilizando oro blanco de 18K y luce un precioso cristal de zafiro abombado con revestimiento anti-reflectante. La corona incorpora el logotipo de Harry Winston. Por último, otro detalle importante, es que lleva una correa de lagarto de color negro y hebilla Ardillon de oro blanco de 18 quilates.
