Musha Cay es la paradisíaca isla privada del famoso mago norteamericano David Copperfield, que en el 2006 pago la friolera de 50 millones de dólares para hacerse con ella. Situada en las Bahamas meridionales, más concretamente en las Islas Exuma, a 136 kilómetros al sureste de Nassau, es sin duda uno de los resorts más espectaculares del mundo.
El ilusionista estadounidense invirtió durante cinco años, otros $40 millones más, para remodelarla a su gusto. El resultado es sencillamente impresionante. Para asegurar la máxima privacidad, Copperfield se hizo con otras diez islas que se encuentran en las inmediaciones.
Cayo Musha es la isla-resort más exclusiva del planeta, con 150 acres de playas de fina arena blanca, aguas color turquesa e infinidad de palmeras. Todo ello en un mágico entorno natural, lleno de flores exóticas y abundante vegetación. Durante el día se puede disfrutar del sol, muy bien acompañado de la suave brisa del mar. Y al llegar la noche, nada es mejor que sentarse a ver la luz de las estrellas.
La isla, conocida como “Bahía Copperfield”, cuenta con una extensión de más de 280 hectáreas, donde vamos a poder encontrar hasta 40 calas.
Una de las singularidades de Musha Cay, es que se puede alquilar la isla al completo. El resort puede albergar hasta 24 huéspedes a la vez, en las diferentes villas con las que cuenta. Las estancias disponen de balcón privado y todo tipo de lujos: camas de gran tamaño, sábanas de seda, cuartos de baño exquisitamente decorados y un sinfín de extras.
Los inquilinos de esta impresionante isla-resort privada, pueden escoger entre alojarse en la casa principal de 1.000 m2, situada en la cima de una pequeña montaña o quedarse en una de las casas con techo de paja que están en la playa, resguardadas de cualquier mirada indiscreta.
El complejo Musha Cay no está exento de ningún detalle: servicios de primera clase, jacuzzis al aire libre, piscinas naturales, playa privada y un increíble establecimiento de restauración abierto las 24 horas al día. Por supuesto, bien acompañado de un discreto servicio para satisfacer todas las necesidades de los más exigentes clientes.
Como te puedes imaginar, Musha Cay es un lugar de ensueño, donde podrás descansar y desconectarte del mundanal ruido. Tendrás también la posibilidad de realizar innumerables actividades, como buceo, pesca, snorkel, excursiones en catamarán, motos de agua y muchas más.
El coste por alquilar esta maravillosa isla privada en el Caribe, es de casi 50.000 euros por pareja y noche, con una estancia mínima de siete días.